Fue humillado por Argentina, se vengó en 1990 y ahora pierde la vida

Los Mundiales de fútbol dejan secuelas a nivel positivo y negativo, tanto en la derrota como en la victoria porque es el torneo por excelencia más importante de la historia del deporte rey del planeta. No hay explicación por la cual se entienda que la frustración de la caída en una final es más o tan importante que la alegría en el triunfo porque quedás en la historia.

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Sin embargo, no son muchos los que se pueden dar el lujo de ganarla más de una vez o tres, como Pelé, ni tampoco son bastantes los futbolistas que saborearon ambas copas mencionadas en el primer párrafo. Sino pregúntenle a Lionel Messi lo que sintió en Brasil 2014 cuando perdió frente a Alemania y qué saboreó cuando derrotó a Francia en Qatar 2022, viendo las dos caras de una misma moneda que son dos polos opuestos sin lugar a duda por varios cuerpos de diferencia.

Pero el rosarino no es el único ni lo será tampoco en el futuro en experimentar ambas facetas del juego en un punto tan cúlmine con su país en el torneo más trascendental de todos los existentes y vigentes. Sino interroguen a Diego Armando Maradona con menos tiempos de diferencia que Leo o a los alemanes que lo sufrieron y lo humillaron sin darle tiempo a un respiro mundialistas. Y uno de ellos ahora perdió la vida a una edad no tan avanzada como sí lo estaba su enfermedad en cuanto a tiempo.

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El campeón del mundo de 1990 que murió

De acuerdo con el medio Mundo Deportivo y el diario Bild, Andreas Brehme falleció hoy a los 63 años debido a un paro cardíaco. Campeón del mundo con Alemania en Italia 1990 y subcampeón mundial en México 1986, el ex lateral izquierdo marcó, de penal, el gol que le dio el tercer título del mundo a su país natal en Roma ante el combinado argentino. A nivel de club, Brehme militó en Saarbrucken, Kaiserslautern, Bayern Múnich, Inter de Milán y Real Zaragoza.