Moviliza Argentina, mirá el pasado oculto del padre de Messi sin casa propia

Parece fácil juzgar o tener envidia por la vida deportiva y personal de Lionel Messi por lo que significa ser y convivir con el mejor jugador del mundo y, según la mayoría, de la historia. Pero todo esfuerzo y éxito posterior tuvo un costado y un pasado negativo o poco feliz, con dificultades a sortear que luego hicieron que todo lo logrado sea valorado el doble o el triple. 

Y uno de los culpables que tuvo que sufrir en el pasado, inclusive antes del nacimiento en 1987 de la Pulga, fue su padre Jorge. Hijo de Eusebio y de Rosa María Pérez, los abuelos de Leo, el primero fue quien le enseñó el oficio de albañil, pero entendiendo que debía estudiar si quería llegar más lejos. Previo a ser técnico químico, pasó por cobrador de un instituto médico y trabajó haciendo tornillos en un taller metalúrgico. Y luego entró a la empresa Acindar en la década de 1980. 

En diálogo con TN, un excompañero de él llamado Daniel Ángel Reche, reveló detalles de las labores de Jorge como laburante: “Jorge estaba en la trepidación de alambres. Viajábamos desde Rosario a Villa Constitución. A veces íbamos en mi auto y otras veces compartimos los remises de la empresa. Tardábamos una hora y diez minutos en llegar. En ese momento deberíamos ser tres mil trabajadores”.

Por qué el papá de Messi se ganó el apodo “Peluca”

Mientras su hijo la descocía en las inferiores de Newell’s Old Boys con 11 años, previo al viaje a Barcelona en 2000, Jorge se ganó el apodo de “Peluca” debido a su frondoso cabello por parte de sus compañeros. Y también se comentaba que era buen jugador de fútbol. Y previo a vivir en la casa donde Leo nació, su familia residía en una vivienda alquilada en calle Levia, casi Estado de Israel, en pleno Rosario. Y tras varios años, sus amigos de aquella época se reencontraron en un restaurante: “Te agradezco por haber compartido tantas horas con vos, Lionel es como mi hijo. Siento una satisfacción tan grande...”.